Los 5 Miradores con las Mejores Vistas en Cusco
Mejores vistas en Cusco
La ciudad de Cusco, en Perú, es conocida por su rica historia y hermosos paisajes. Entre los numerosos atractivos que ofrece, se destacan cinco impresionantes miradores que brindan vistas panorámicas de la ciudad y sus alrededores. Estos miradores son destinos populares para los visitantes que desean capturar la belleza y la grandeza de Cusco desde diferentes perspectivas. Cada uno de estos puntos de observación tiene su encanto único y características distintivas, lo que los convierte en paradas obligatorias para aquellos que desean explorar y apreciar la majestuosidad de esta fascinante ciudad. Desde calles estrechas y pintorescas hasta estatuas monumentales y torres de piedra, estos miradores ofrecen una experiencia inolvidable para los amantes de la fotografía y los viajeros en busca de momentos mágicos. Acompáñanos en este recorrido por los miradores de:
- Santa Ana
- San Cristóbal
- San Blas
- Cristo Blanco
- Pachacútec
Mirador de Santa Ana
El vecindario de Santa Ana es uno de los más antiguos de la ciudad. Explorar este encantador lugar puede ser como realizar un viaje en el tiempo, ya que su historia se remonta aproximadamente a 700 años antes de Cristo. Sus calles estrechas, una iglesia con una torre alta y un mirador con vistas espectaculares son características distintivas. Entre los destinos más hermosos de la ciudad de Cusco, este sector se destaca por su pasado histórico.
El Mirador de Santa Ana se encuentra en la zona más elevada del noreste de la ciudad. Esta ubicación privilegiada ofrece vistas impresionantes de la plaza principal y del camino que lleva al Cristo Blanco. Está ubicado en la plaza del mismo nombre. Aquí tienes la oportunidad de disfrutar de las vistas de la ciudad tanto de día como de noche.
Ubicación
Se encuentra en la posición más alta adyacente a la iglesia de Santa Ana, en el histórico barrio de Santa Ana en Cusco.
Para llegar al mirador, simplemente comienza a caminar desde la Plaza de Armas y sigue por la calle Plateros. Luego, gira a la izquierda en la calle Siete Cuartones y continúa recto hasta llegar a la calle Méloc. En la calle Méloc, gira a la derecha y continúa recto por la calle Santa Ana hasta llegar al mirador.
El recorrido a pie dura aproximadamente 20 minutos, cubriendo una distancia total de aproximadamente 1.1 kilómetros. Al llegar al mirador, no es necesario pagar ninguna tarifa de entrada, ya que la entrada es gratuita.
Mirador de San Cristóbal
¿Estás en busca de un lugar para dar un paseo o capturar fotografías de la ciudad? El mirador de San Cristóbal es una excelente opción para esta ocasión. Situado cerca de la plaza principal, desde este lugar podrás contemplar la ciudad en toda su magnificencia. Este mirador, al igual que el situado en San Blas, se encuentra en una plazuela frente a la iglesia de San Cristóbal.
Considerado el mirador más destacado de la ciudad del Cusco, se encuentra adyacente a la iglesia de San Cristóbal. Durante la época colonial, la iglesia fue mandada a construir por el Inca Paullo, hijo del antepenúltimo emperador Inca Huayna Capac.
Desde este mirador, podrás admirar prácticamente todos los barrios del Cusco, exceptuando los distritos de San Sebastián y San Jerónimo. Si lo deseas, también tendrás la opción de ingresar a la iglesia y su campanario, con un costo de 5 Soles por persona.
Ubicación
Este mirador se encuentra a 20 minutos a pie desde la Plaza de Armas, en dirección a Saqsayhuaman, a una distancia aproximada de medio kilómetro. Para llegar allí, simplemente camina hacia el norte de la Plaza de Armas por la calle Suecia hasta llegar al colegio Salesiano, luego continúa por la pista asfaltada.
Al llegar, no es necesario pagar ninguna tarifa de entrada, ya que la entrada es gratuita.
Mirador San Blas
Hay muchos lugares hermosos en Cusco, y uno de ellos es el encantador barrio de San Bla. Ubicado en el centro histórico, este barrio alberga varios atractivos, entre ellos, un encantador mirador.
El barrio de San Blas, considerado el más artístico de Cusco, ha sido hogar de familias dedicadas a la arquitectura y la artesanía desde tiempos antiguos. Sus construcciones, que combinan elementos coloniales con influencias andinas, reflejan su rica historia.
A diferencia de los demás, el mirador de San Blas se destaca por su aspecto moderno gracias a una reciente renovación. Es un lugar muy visitado por los turistas debido a la gran variedad de negocios que lo rodean, como hoteles, hostales, restaurantes, bares y lavanderías.
Ubicación
Para llegar al mirador, puedes caminar desde la Plaza de Armas por la calle Hatumrumiyoq y continuar por la calle-cuesta de San Blas hasta llegar a la Plaza de San Blas. Desde allí, gira a la izquierda y sigue por la calle Tandapata. Luego, llegarás a la Calle Pasñapaskana, que es una calle peatonal con escaleras, y finalmente llegarás al mirador.
Desde este mirador, tendrás vistas panorámicas del barrio de San Blas, Santa Ana, San Cristóbal, San Pedro y todo el centro histórico. El trayecto a pie hasta el mirador tomará aproximadamente 25 minutos, cubriendo una distancia total de unos 800 metros. Al llegar, no es necesario pagar ninguna tarifa de entrada, ya que la entrada es gratuita.
Mirador del Cristo Blanco
Una vez que hayas preparado tu cámara, solo tienes que elegir el mejor ángulo. El Mirador del Cristo Blanco se encuentra en el cerro Pukamoqo, a una altitud aproximada de 3.600 metros sobre el nivel del mar. Esta ubicación estratégica te permitirá pasar horas tomando fotos y enamorándote aún más de esta impresionante ciudad.
El mirador recibe su nombre de la enorme estatua del Cristo Blanco, erigida en 1945 por el escultor cusqueño Ernesto Olazo Allende. Este monumento fue donado por la colonia árabe-palestina y se encuentra ubicado al noreste de la ciudad, cerca de la fortaleza de Sacsayhuamán, uno de los lugares más hermosos de Cusco.
La estatua fue donada por la comunidad árabe-palestina que llegó a la ciudad de Cusco a mediados del siglo XX. Fue construida en 1945 y diseñada por el escultor cusqueño Francisco Olazo. Con una altura de 10 metros, representa a la figura divina con los brazos abiertos en señal de protección hacia la ciudad.
Ubicación
Para llegar al Mirador del Cristo Blanco, puedes comenzar caminando desde la Plaza de Armas, pasando por la calle Hatunrumiyoc y luego tomando la calle Atoqsayquchi en el barrio de San Blas, hasta finalmente llegar a la avenida principal en la montaña, donde deberás girar a la izquierda.
El tiempo estimado a pie es de 45 minutos a 1 hora, cubriendo una distancia total de aproximadamente 1.5 kilómetros. Al llegar, no es necesario pagar ninguna tarifa de entrada, ya que la entrada es gratuita tanmbien puedes tomar un city tour para complementar tu visita.
Mirador de Pachacútec
Al regresar al centro de Cusco, te encontrarás con el impresionante monumento al inca Pachacútec. Una estatua de bronce que llama la atención de todos los que pasan por el óvalo que lleva su nombre. A diferencia de otros miradores, este se encuentra dentro de una torre de piedra que sostiene la estatua, desde donde podrás contemplar el centro de la ciudad y las montañas.
La estatua, construida en 1991 por el escultor cusqueño Fausto Espinoza, está hecha de bronce y tiene una altura de 11.50 metros. Se encuentra ubicada en una torre de piedra que tiene 25 metros de altura y nueve niveles, donde se exhibe una gran cantidad de arte relacionado con la historia de Cusco.
El mirador se encuentra en la base de la estatua del emperador Pachacútec, desde donde podrás tener una vista panorámica de la avenida El Sol y la avenida 28 de Julio. El monumento también cuenta con un museo en su interior, donde podrás aprender sobre este gobernante inca y disfrutar de una sala interactiva. Además, el lugar te ofrece la opción de descansar en los jardines que lo rodean, sentarte en uno de los bancos y admirar esta impresionante construcción.
Ubicación
Si no deseas subir cuestas, te recomendamos este mirador. Para llegar, comienza desde la Plaza de Armas y camina por toda la avenida El Sol hasta llegar al Óvalo de Pachacútec, donde se encuentra este mirador. El paseo es fácil (no hay pendientes pronunciadas), y te tomará aproximadamente 20 minutos a pie, cubriendo una distancia de 2.1 kilómetros. El mirador está abierto todos los días de 9 a. m. a 4 p. m. Para ingresar, necesitarás comprar el Boleto Turístico. Alternativamente, también puedes pagar un precio individual solo para visitar esta atracción.
Top 5 Mejores vistas en Cusco